Esta semana hemos hecho referencia dos veces al odio que el ex Presidente Aznar despierta entre los círculos progres e izquierdistas españoles, que le siguen culpando de todos los males de España seis años después de abandonar voluntariamente el poder.
Este sábado hemos tenido una nueva muestra de este sentimiento extremista en un artículo del plumilla pesebrero Antonio Casado en El Confidencial.com. Tras regresar de sus vacaciones, y ante la situación económica y política nacional, Casado se ha estrenado con una bomba contra Aznar en la que dice cosas como:
- Personaje innecesario que riñe en inglés
- Sólo nos quedaba por ver al suegro de Agag, en su versión más ultra, explicando públicamente a Obama lo que EE UU debe hacer en nombre de los valores judeocristianos
- Casual o no, la deposición de Aznar
- Se abstuvo Aznar de proponer la invasión de Irán, Siria, Cuba, Venezuela,
- La nota castiza viene de la mano del ex presidente español, José María Aznar, que se ofrece como caudillo internacional de esta nueva cruzada y emula así al Cid Campeador, matador de sarracenos aún después de muerto.
También, en un artículo que poco menos que pone al mismo nivel a Fidel Castro y Aznar, Manuel Rivas en El País
- Nuestro candidato a gobernador honorario de Arizona, José María Aznar, cada día se parece más al personaje de La sombra de Christian Andersen, allí donde el personaje confía poderes a su sombra hasta que esta se apropia del original. El doppelgänger de Aznar se va apropiando de José Mari
Y para acabar, aunque hay muchos más no vamos a perder más tiempo reflejando doscientos odiadores de Aznar en este post, Josep Ramoneda en El País afirma que:
- El PP ha hecho exhibición de los demonios eternos de la derecha española. Su obsesión con Marruecos y con Cuba es enternecedora. Al parecer la pérdida de la isla caribeña -réquiem por el imperio en el que no se ponía el sol- y los desastres coloniales en el norte de África, todavía revuelven las entrañas de la derecha hispánica. .... el visceralismo de Aznar convierte en balsámica la inacción de Rajoy.
Yo por mi parte tengo que confesar que me encanta Aznar, y me refiero a la figura demoníaca para la progresía patria y no a la figura del personal del ex presidente, no lo puedo evitar. Cada vez que sale en televisión, en la radio o en la prensa a los progres les da un ataque de nervios, pierden hasta la compostura, critican su pelo y su envidiable estado físico.
Nunca leí a Casado decir que las idioteces de Zapatero eran deposiciones, que lo son, pero él nunca se atrevería a decirlo. Casado recuerda en su columna lo que Tony Blair nos cuenta sobre la postura de Aznar hacia la guerra de Iraq, pero el plumilla no recuerda como Blair alaba a Aznar por defender a España con uñas y dientes en las negociaciones de la UE, esas en las que Zapatero entra habiendo vendido ya hasta los calzoncillos.
En fin, que me encanta, que Aznar no debería morir nunca aunque sólo fuera por ver a los "progres al borde de un ataque de nervios".
Nunca leí a Casado decir que las idioteces de Zapatero eran deposiciones, que lo son, pero él nunca se atrevería a decirlo. Casado recuerda en su columna lo que Tony Blair nos cuenta sobre la postura de Aznar hacia la guerra de Iraq, pero el plumilla no recuerda como Blair alaba a Aznar por defender a España con uñas y dientes en las negociaciones de la UE, esas en las que Zapatero entra habiendo vendido ya hasta los calzoncillos.
En fin, que me encanta, que Aznar no debería morir nunca aunque sólo fuera por ver a los "progres al borde de un ataque de nervios".
No hay comentarios:
Publicar un comentario