EL CUPO CATALÁN Y LA RECAUDACIÓN EN EL RESTO DE ESPAÑA

Artur Mas, el candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, insiste en campaña electoral en que se apruebe un cupo fiscal para Cataluña y que ese será el eje de su actividad de gobierno si gana las elecciones, como todo parece indicar. Va llegando el momento de que se apruebe dicho cupo pero bajo las siguientes condiciones: 

- Café para todos. Madrid y las otras comuidades autónomas deben tener el suyo.

- El IVA se recaudará en los territorios donde se pague. Ya que se repercute en los clientes finales, se recaudará en las CC.AA. de domicilio de estos.

- El Impuesto de Sociedades de las filiales y agencias de las empresas se declarará en la CC.AA. donde estén ubicadas, y sobre el total recaudado por la sede que no disponga de filiales se transferirá un porcentaje a cada CC.AA. según los beneficios obtenidos en cada una de esas comunidades.

De ese modo, cada CC.AA. disfrutará el IRPF, IVA e IS que genera la actividad económica de su región, por los beneficios empresariales generados por sus ciudadanos en esos territorios y por los impuestos que pagan sus ciudadanos.

Se podría alegar que esta propuesta es muy difícil de llevar a cabo por la complejidad burocrática que podría suponer su puesta en marcha, pero acabará siendo un procedimiento rutinario con el perfeccionamiento de su uso.

¿Qué esto supone cambiar la legislación tributaria? Pues adelante, si hay propuestas para cambiar la Constitución para acomodar a esas CC.AA. que tanto protestan, no debería haber mayores problemas para cambiar una ley ordinaria. Al mismo tiempo que se modifican las leyes tributarias y de financiación de las CC.AA., habrá que aprobar mecanismos de compensación y/o de solidaridad territorial. Pero es viable, difícil pero viable, y sobre todo justo, mucho más justo que el cupo catalán que nos proponen, pero es que lo que los políticos catalanes buscan no es justicia sino provecho propio.

¿Es justo? Depende de qué tipo de país queremos tener. Uno insolidario donde cada CC.AA. sólo se preocupa de si misma o uno donde la solidaridad interterritorial no sólo es una cuestión de ética pública sino una obligación política y legal como consecuencia de disponer de un mercado sin barreras aduaneras.

¿Cómo se recauda el IVA actualmente?

Los ingresos por IVA para Cataluña se producen , p.ej.,aunque se compre un SEAT en Burgos (o en Galicia, o en Madrid). Basta con que el producto que se adquiera lo fabrique o distribuya una empresa con sede social en Cataluña. El mecanismo es: 

1) El consumidor final, el cliente, lo paga a la empresa que lo vende. En este caso se supone que un concesionario de SEAT en Burgos. 

2) Al concesionario, como a cualquier otra empresa, el IVA no le afecta en sus cuentas. Trimestralmente éste ingresa en la Administración Tributaria Central (Hacienda) sin tocarlo (en realidad liquida la diferencia entre lo que ingresa por IVA y lo que repercute). Es la Hacienda Estatal la que recauda el IVA, no las CCCAA., al igual que el IRPF, que lo ingresa el Estado, no las CCAA, aunque luego reparte un porcentaje. 

3) Una vez computado el IVA, la Administración Central cede a las CCAA un porcentaje de lo recaudado por IVA según las ventas de las empresas fabricantes o distribuidoras radicadas en las respectivas CCAA (con independencia de dónde se haya hecho la venta). De esta forma, el Estado financia las comunidades, a través de un porcentaje del IVA abonado por los clientes de toda España por los productos que las empresas ubicadas en esas CCAA fabrican o distribuyen.

Es decir, de los impuestos de V.A. pagados por los ciudadanos de cualquier CCAA española sobre productos, materiales bancarios o de cualquier otro sector, fabricados o distribuidos por empresas con sede en Cataluña, las respectivas CCAA no reciben directamente un céntimo de euro, ya que un porcentaje se va a Cataluña y el otro al Gobierno Central que lo redistribuye según sus intereses políticos.

Mas reclama que Cataluña conserve el 100% de ese IVA de las empresas con CIF catalán y después ser el Gobierno catalán el que ceda una parte de lo recaudado al Gobierno central, para mantener los servicios prestados por el Estado (Defensa, Asuntos Exteriores y no muchos más teniendo en cuenta las numerosas competencias transferidas). 

¿Es justo este sistema? No, tanto peor cuanto mayor haya sido la cadena de valor fuera de la Comunidad que produjo el bien hasta llegar al consumidor final. Llegamos a la paradoja de que un impuesto que grava el valor añadido por la cadena de los bienes desde que se fabrican hasta que recaen en el consumidor final, sólo beneficia al origen de la cadena, no al resto de participantes. 

En el ejemplo que nos ocupa, Castilla-León no vería nada del IVA recaudado por comprar un coche fabricado en Cataluña, los impuestos pagados por un ciudadanos burgalés sólo servirían para financiar infraestructuras en Cataluña.

Aquí pueden encontrar otra explicación con otros ejemplos del sistema de financiación que espera sacar adelante Cataluña. Y si prefieren la opinión de un experto, Roberto Centeno, Catedrático de Economía, la pueden encontrar aquí, su opinión se refiere a las consecuencias de la aprobación de la financiación contemplada en el Estatuto de cataluña, pero no es difícil extraer las que tendría la aprobación de un cupo, sistema que además falsea la realidad fiscal y las relaciones con el Gobierno central, como afirma Joseba Arregui, y que llevaría a una situación insostenible en España.

Y porqué esta propuesta, porque lo que Mas y Cataluña quieren es quedarse con los impuestos de las empresas catalanas obtenidos con la actividad económica que se genera en toda España. Vamos, convertirnos en su colonia económica, como ya lo somos en parte de los vascos y navarros.

Realizada esta misma propuesta en un foro de El Confidencial toda la respuesta que obtuve por parte de los catalanes fue insultos personales, pero ni una palabra sobre la posibilidad o conveniencia política de llevarla a cabo. Es evidente que es una propuesta que va contra los intereses económicos de Cataluña y Madrid, y favorece los de otras comunidades. Por eso es más fácil atacar a la persona que a la propuesta.

Pablo Sebastián mantiene una posición similar en República.es, aunque no la expone de forma tan directa. Así afirma: 

"... que se cuide Artur Mas con sus chantajes y sus conciertos y monsergas con las que amenaza con romper la unidad nacional y la solidaridad entre regiones españolas no vaya a ser que renazca la guerra del cava pero esta vez a lo grande y de manera profunda y a la vez definitiva y entonces los catalanes sabrán que, en contra de lo que allí se pregona, Cataluña vive a costa del resto de España y no al revés porque es donde está su clientela, sus visitantes y sus recursos financieros.

No vaya a ser que de una vez por todas y desde todos los rincones de España se prohíba o se pida que no se compren productos catalanes de toda índole y no solo él cava, que se exija que el IVA permanezca en el lugar donde se contrata –y que no se lo lleven luego a Cataluña-, que los bancos catalanes tengan que dejar el resto del territorio español, que las empresas energéticas controladas por fondos catalanes no puedan contratar clientela en el resto de España, que los automóviles que allí se fabrican no se vendan fuera de esa Comunidad, ni ningún producto de origen catalán, que el resto de españoles no pase vacaciones de invierno o verano en Cataluña, etcétera, etcétera, y entonces aprenderán el mentiroso de Artur Mas, y sus aliados de ERC que Cataluña vive del resto de España y no al revés.

Y que la balanza comercial entre Cataluña y el resto de Comunidades es muy favorable a los catalanes y está muy por encima del presunto déficit fiscal, que en cuanto le quiten el IVA que no es suyo vamos a ver cómo queda.

..... lo único que van a lograr es que todas las grandes entidades financieras –ya verán lo que pasa cuando las cajas de ahorro se conviertan en bancos- y empresas catalanas abandonarán sus sedes en ese territorio insolidario y las trasladarán a las otras capitales españolas y españolistas que son donde está la gran mayoría de su clientela.....

....Todo en esta vida tiene un límite y ya está bien de lamentos y chantajes en España e incluso en Europa donde las aventuras nacionalistas no tienen la menor cabida y menos en plena crisis de estabilidad financiera y social...."